jueves, 22 de octubre de 2009

La alimentación de los niños de hoy y las esencias florales.

La limpieza interna depende de la dieta, para lo cual deberíamos elegir bebidas y alimentos limpios, sanos, y tan frescos como sea posible…. La carne de cualquier animal debería ciertamente ser evitada, porque suministra al cuerpo demasiadas toxinas; en segundo, porque estimula un apetito anormal y tercero porque implica crueldad hacia el reino animal…” Eduard Bach.


La aparición de personas que presentan trastornos en la respuesta ante la exposición a múltiples compuestos químicos es cada vez es mayor. Este fenómeno fue descrito en la década del 50 del pasado siglo, por el doctor Theron Randolph, y ha recibido diferentes denominaciones Sensibilidad Química Múltiple (SQM,) Síndrome de hipersensibilidad química, Alergia universal, Enfermedad del Siglo XX, Síndrome de Respuesta a las Sustancias Químicas, Enfermedad ecológica, etc. [1] Cualquiera sea el nombre científico que queramos darle, la alimentación es uno de los temas centrales que impacta directamente sobre la salud y comportamiento de este síndrome en niños. Mi propia experiencia y la vasta información que se ha difundido sobre el tema, permiten afirmar con bastante certeza que la ingesta de determinadas comidas produce en estos niños un importante cambio abrupto de comportamiento, notable y desestabilizador y trasladados a otros ámbitos de su desempeño, tales como la escuela y la relación con sus pares.

Intolerancia alimentaria:
o Productos sintéticos
o Conservantes
o Colorantes
o Leche y derivados
o Harina de trigo y otras
o Cereales
o Medicación alopática
o Perfumes y desodorantes


Comportamiento asociado a la intolerancia
o Hiperactividad
o Irritabilidad
o Déficit de atención.
o Pérdida de rendimiento escolar
o Falta de concentración
o Tics nerviosos
o Sangrado nasal
o Enuresis primaria
o Reacciones alérgicas en piel
o Acidez.
o Tos crónica producto de la acidez
o Laringitis por reflujo
o Malestar generalizado.
o Diarreas
o Molestias estomacales
o Obstrucción nasal

Respecto de la alimentación podemos analizar dos argumentos de las razones por la cual estos niños poseen una importante intolerancia alimentaría a determinados alimentos: a) por un lado la propia enseñanza que nos vienen a regalar, donde nos muestran la necesidad de que cambiemos nuestros hábitos alimenticios por comidas más sanas para nuestra salud y b) la propia sensibilidad y vibración de estos niños
El cuerpo físico del niño con alma evolucionada también es muy sensible. Con frecuencia ellos no pueden tolerar alimentos procesados y comidas aditivas. También responden de mala manera al azúcar y a la cafeína.Esto quiere decir que los dulces, bebidas con colorantes artificiales, galletas, pasteles, hamburguesas y chocolates crearán un comportamiento disfuncional e hiperactivo en el niño. Alimentar a un Niño con chocolate y coca-cola literalmente es el equivalente a darle al niño una droga. Su sistema responderá volviéndose demasiado activo – produciendo comportamiento hiperactivo- seguido por un “choque” o berrinche cuando los efectos desaparecen y el niño “regresa” y sufre de retiro de los síntomas de la azúcar y la cafeína.Esto también puede significar que una dieta “normal” no será tolerada por muchos. El pollo y la carne están llenos de hormonas, antibióticos y químicos, y la mayoría de los alimentos refinados o procesados que hay en los supermercados también contienen químicos que pueden no ser tolerados. Además, el niño puede ser intolerante a los cereales, produciendo síntomas como eczema, problemas digestivos y desórdenes de sinusitis y de oído/nariz y de garganta.
Esto es lo más difícil de monitorear, ya que la compra cómoda y la presión de la sociedad significa que el niño estará expuesto al “glamour” de la comida chatarra.[2] Y en este sentido a veces – y lo he aprendido en carne propia- los niños prefieren una tarde alegre con un helado sintético y repleto de colorantes que una “prohibición” constante sobre determinados productos. No olvidemos que son niños y necesitan vivir y disfrutar como otro niño cualquiera.
Por otro lado, en las sociedades donde vivimos resulta difícil cuando no imposible alejar nuestra dieta de productos sintéticos y el acceso a productos de origen orgánico no está tan difundido ni controlado como debería ser.
La mayoría de los padres se dan cuenta que el temperamento o humor de sus hijos, así como los niveles de energía que manejan, se afectan por el tipo de comidas y bebidas que ingieren. Los factores nutricionales tienen una relación directa con la conducta de los síndromes como el de Déficit de Atención, la Hiperactividad, la irritabilidad y la fatiga.
Ya está comprobada la influencia negativa que tienen los alimentos con colorantes artificiales, azúcar y aditivos, sobretodo antes de ir a dormir. No obstante, los niños prefieren seguir ingiriendo este tipo de comida chatarra porque es "más sabrosa". La comida "sana" no sabe igual.
La mayoría de estos niños son muy quisquillosos para comer. Son extremadamente sensibles a la textura de la comida, a los sabores y a los olores. Los padres tienen que tener conciencia de esto, y en la medida de lo posible permitirles comer lo que ellos desean y no comer los alimentos que ellos rechazan. La comida es energía y por lo tanto contiene un nivel vibracional. Mientras más sana es, mayor será su vibración. Los Niños evolucionados en sus almas tienen que mantener un nivel vibracional elevado para poder llevar a cabo su misión. Por lo tanto, el mayor regalo que un padre puede darle a sus hijos es enseñarlo a comer correctamente, mostrándole el nivel energético que contienen los alimentos y cómo, a través de la experiencia directa, se van a sentir después de comer comida chatarra o baja en contenidos vibracionales; esto es enseñarles a diferenciar el nivel vibracional de cada alimento para que sean ellos mismos los que aprendan a elegir que alimento los va a hacer sentirse bien.
La comida contiene energía vital. Lo que mata la energía vital es el uso del microondas, el consumo de alimentos congelados y enlatados. La energía vital se mantiene en los alimentos únicamente 20 minutos después de haberlos cocinado y licuado. Por tal motivo es indispensable consumir alimentos vivos, frescos, diariamente.
Los alimentos refinados como el azúcar y las harinas blancas, los colorantes y conservantes artificiales no contienen ningún tipo de energía vital. Hay que evitarlos y sustituirlos por alimentos sanos y disfrutable: amaranto, granola, semillas como las almendras, nueces de la India, fruta fresca.

Los padres tienen que aprender a observar los cambios bruscos de conducta en sus hijos y analizar detenidamente si estos vienen después de haber comido o bebido algo en especial. Una vez que aprendan a detectar estos cambios de conducta pueden ver cuáles son los alimentos que los producen y generalmente van a ser alimentos como refrescos, con un alto contenido de azúcar refinada y colorante artificial, cafeína y chocolates. En estos casos sería conveniente eliminarlos de la dieta de sus hijos y observar los resultados.[3]
Una lista recomendable de alimentos debería incluir las siguientes recomendaciones:
*Quitar caloría vacía como son los cereales de caja, panecillos, harinas y azucares refinadas, refrescos, galletitas dulces con colorantes.
*Incluir miel de abeja, azúcar moscabado, alimentos integrales.
*Darles a consumir alimentos vivos, frescos y sanos.
*Incorporar algunos suplementos dietarios naturales en base a omega, algas y lecitina de soja.
*Beber abundante agua.



Reconozco por experiencia propia que es inevitable que en algún momento nuestros hijos ingieran estos productos a lo largo de su propio crecimiento, por lo que resulta atractivo contar con algunas esencias florales que permitan la “limpieza interna” de la que nos habla Bach y fomentar la autocuración. Sin embargo, y aunque la fórmula que analizaremos más abajo tienta a pensar en la misma como una respuesta “sanitaria”, deseo analizar en ella el contenido que Bach intentó trasmitir sobre el proceso de curación y su visión “iniciática” de la enfermedad. Como explique en otras líneas incluimos flores de otros sistemas florales…. Flores al fin.

Esencias Florales alimentación:

Crab Apple:

Está representado por el arquetipo de "la Purificación", como liberación de lo que es extraño a la esencia del ser.
Dice Bach sobre esta Flor: “es el remedio de la purificación y puede aplicarse a todos aquellos que sienten como si en ellos existiese algo que no está del todo limpio. … por tratarse de un remedio purificador limpiará las heridas si el paciente tiene alguna razón para creer que algún veneno ha penetrado en su cuerpo.” [4]

Beech:

Esta flor esta representada por el arquetipo de la “intolerancia” y Bach la ubica dentro del grupo de “sobreprotección o excesiva preocupación por el bienestar ajeno” y describe esta flor con la siguiente descripción: “ para aquellos que sienten la necesidad de ver más bondad y belleza en todo lo que los rodea, y aunque muchas cosas parezcan estar mal, tienen la virtud de ver el bien creciendo en su interior. El remedio los ayuda también a ser más tolerantes, indulgentes y comprensivos con respecto a los distintos caminos que cada individuo transitan en su intento de llegar a la perfección final”. [5]

Chaparral:

Esta flor limpia a nivel mental al estilo de crab apple. Es una planta muy útil en personas cargadas o intoxicadas por tensione psíquicas provenientes de estímulos cotidianos u otras emociones violentas que perturban su orden interno. Limpia y organiza psíquicamente a los individuos expuestos a cargas energéticas negativas o estrés. [6]
Según Espeche y Grecco, esta flor se ubica dentro del grupo de “vida energética” y trabaja restaurando y renovando las energías vitales y equilibrando las fuerzas curativas.[7]

Self Heal:

Esta flor del sistema de California, - “curar-se”- favorece la confianza en uno mismo y permite desarrollar la capacidad interna de curación que cada persona posee.
Stern nos comenta respecto a esta flor que “favorece al confianza en uno mismo, y permite desarrollar la capacidad interna de curación y transformación que cada individuo posee.” [8]
Volviendo a la visión de Espeche y Grecco, esta flor se ubica en el grupo de “autorrealización” ya que trabajan sobre la apreciación, sobre el propio valor, dan seguridad limpian y suavizan el alma, dan aprecio del propio cuerpo. [9]


Si intentamos hacer un ejercicio de superar la visión tradicional “sanitaria” y de estricta limpieza que nos plantea – a simple vista- la fórmula descripta, podríamos afirmar centrándonos en el legado de Bach y su invitación a una visión iniciática de la cura de la enfermedad, los niños de hoy al usar esta fórmula podrían alcanzar otras experiencias. En primer lugar, y aún sin llegar a identificarse demasiado con sus cuerpos, estos niños deben tratar a los mismos con respeto y cuidado, de modo de mantenerlos sanos y que resistan al tiempo suficiente como para cumplir su misión. – y enseñen a otros los mismos conceptos- [1]. En segundo término. el cuerpo es un simple vehículo del alma y servidores de nuestra voluntad – de los niños en este caso. El tercer componente es el de la necesidad de mantener y restaurar la energía vital, sellando el cuerpo etérico y liberando tensión (típico en estos niños) y por último, aprender a valorarse, suavizar el alma y confiar en el propio poder de curación.


Coincido con Claudia Stern cuando afirma que es conveniente investigar si las alergias pueden indicar un nivel profundo de temor, tal vez algún miedo a tener que participar más plenamente en la vida, o a despojarse de determinadas ayudas para ser más independiente, dado que padecer de alguna alergia supone también una forma de obtener más compasión, apoyo y atención de los demás. ¿A qué son realmente alérgico? ¿ Ante qué reacciona de un modo excesivo? ¿Qué es lo que verdaderamente origina la irritación y la gran respuesta emotiva de su organismo? ¿Qué es lo que tanto temen que entre en su interior, hasta el punto de reaccionar con tanta virulencia en su contra? ¿Existe algo que me inspire suficiente recelo como para proyectarlo lejos de ellos?[1]

Podemos inferir conforme a la visión que nos plantea Bach y que analizamos al inicio de este trabajo - ¿por qué las almas evolucionadas de estos niños enferman?- que las razones del enfermar a través de una alergia alimentaria tendría vinculación, siguiendo aquella lógica:
1º) Los niños con alma evolucionada tienen males que en realidad no son de ellos sino para ayudarnos a aprender que debemos cuidar nuestros cuerpos ingiriendo alimentos sanos para cuidar el “hogar del alma”.
2º) La enfermedad es el resultado de la “interferencia” de los adultos aportando a estos niños dietas vacías en calorías, sintéticas y plagadas de conservantes,
3º) Lo dificultoso que resulta para estos niños cumplir sus misión ingiriendo comidas que no les permite mantener su nivel vibracional elevado para llevar a cabo su misión.
4º) Estos niños generan “altas expectativas” en lograr principalmente en sus padres y maestros una mejor evolución también con aquello que comemos, y que cuando no lo logran (por ejemplo mejorar la dieta familiar o cambiar las golosinas de las cantinas escolares) surgen en ellos sentimientos conflictivos y frustración.
5º) Al ser (al decir de Bach) la salvación y evolución una tarea “colectiva”, ese “día de colegio” que nuestros niños nos desean enseñar a través de conductas alimentarias puede llevar a que perciban rápidamente cuando otra salmas no se acercan a su cometido.
6º) Una nueva encarnación trae consigo una valija de temas pendientes que resolver (individuales y colectivos) que requiere para el niño una resolución común (la ingestión de carne, el cultivo de productos orgánicos libre de conservantes, el uso de pesticidas, el equilibrio del medio ambiente).

En definitiva, pensar recetar en términos de cuerpo-alma, energía vital, valoración y autocuración, es una manera de recetar “mirando al cielo” , es conducir a los niños en su camino de iniciación, al decir de Eduard Bach, y es acercar una escalera para que el alma de estos niños se conecten más con el Creador pero también con la Tierra. Un niño es eso, “un niño”, no es un adulto, no es un mesías, y por más dones espléndidos que ellos tengan tienen sobretodo el derecho a la infancia, acompañémoslos entonces en ese camino entre la tierra y el cielo. Receten mirando al cielo pero con los pies en esta bendita Tierra.
Graciela


[1] STERN, Claudia, Las alergias, en http://www.esenciasflorales.net/inicio/ARTICULOS/art2/alergias.htm Consultado el 20 de julio de 2009.
[1] BACH, Eduard, Op. Cit, pág. 132,
[1] ORDAZ CASTILLO, E. Marqués Marqués, F. Síndrome de Sensibilidad Química Múltiple a sustancias químicas: Un problema ambiental emergente. Revista Salud Ambiente, 2001;1(2):92-6
[2] FUNDACION PARA LOS NIÑOS Y JOVENES DE LA NUEVA ERA. Página Web [ http://www.indigos.com.mx/ ] Consultado 3 de abril de 2009.
[3] Ibidem.
[4] BACH, Eduard, Op. Cit, pág. 85.
[5] Ibidem, pág. 86.
[6] STERN, Claudia, Remedios Florales de California, Ed. Lugar Editorial, 2º ED, 2001, Buenos Aires, Pág. 61.
[7] ESPECHE, Bárbara y GRECCO, Eduardo, Flores de California. Manual práctico y clínico, Ed. Continente, 6º Ed, Buenos Aires, pág. 93.
[8] STERN, Claudia, Op. Cit, pág. 122.
[9] ESPECHE, Bárbara y GRECCO, Eduardo, Op. Cit, pág. 139.